Tierra
trágame
Me invitaron a un desfile de una
diseñadora novel. Encontré un sitio en la cuarta fila. Allí había una señora de
mediana edad muy exagerada vestida y más pintada que una puerta.
Empezó el desfile, colores
chillones y una combinación de conjuntos
casi imposibles. Primer codazo -¡Mire,
qué ideal! Soy la madre de la diseñadora-. Continuó el desfile y cada vez las
prendas eran más estrambóticas. La señora codazo y codazo. Creo que al noveno
tenía el brazo dormido, así que me armé de valor y le dije. -Mire a mi
personalmente no me gusta y no me lo pondría aunque me lo regalasen-. La señora
no volvió abrir la boca.
Al día siguiente tenía una
entrevista de trabajo. Fui muy ilusionada pues tenía posibilidades. Al abrir la
puerta pensé… ¡Tierra trágame!
Alli estaba la señora del desfile
Alli estaba la señora del desfile
A.R.G.
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